// //

25 de agosto de 2023 | Actualizado en 2025

Las piscinas son una fuente inagotable de diversión y relax durante los meses de verano, pero mantenerlas a una temperatura agradable puede llegar a ser un complicado desafío. Sin embargo, existe una solución tan sencilla como eficiente para mantener o aumentar la graduación térmica del agua de una piscina: las mantas térmicas. Una manta térmica es una cubierta fabricada con materiales de alta calidad como el polietileno que se extiende sobre la superficie del agua y está diseñada para disminuir tanto la pérdida de calor como la evaporación del agua de la piscina, lo cual contribuye a alargar la temporada de baño.

¿Cómo funciona?

Los cobertores solares para piscina consta de una capa con burbujas de aire que permite absorber el calor del sol durante el día, transferirlo al agua y conservar la temperatura alcanzada por la noche.

Además de retener el calor absorbido, el cobertor de verano también previene la evaporación del agua, puesto que actúa como barrera frente a las altas temperaturas. De este modo, la lona contribuye a conservar tanto el volumen de agua que alberga la piscina como la dosis de productos químicos utilizados en el tratamiento de la piscina.

Igualmente, un cobertor de verano supone el ahorro de hasta un 60% de energía, lo cual hace más eficiente la funcionalidad de los sistemas de climatización de la piscina.

Beneficios de una manta térmica

Conservación del agua

Al evitar la evaporación del agua, la cubierta de verano ayuda a conservar la cantidad de agua que contiene el vaso de la piscina, por lo que, a su vez, reduce el consumo de agua de la vivienda.

Uso de productos químicos

En la misma línea, reducir la evaporación de agua también supone disminuir la evaporación de los productos químicos que llevan a cabo la desinfección y el mantenimiento del agua. De esta manera, se mantiene su concentración y efectividad, evitando la necesidad de añadir más dosis de producto o incrementar la frecuencia de uso.

Mantenimiento

Un cobertor de verano protege la piscina de la caída de suciedad en su interior, ya que se coloca sobre la superficie del agua. Por tanto, la lona facilita la limpieza de la piscina convirtiéndose en un elemento más para el mantenimiento de la instalación durante la temporada de baño.

Duración de la temporada de baño

Al absorber y retener el calor del ambiente, la manta térmica alarga la temporada de baño durante las semanas previas y posteriores al verano, permitiendo disfrutar de la piscina durante más tiempo a lo largo del año. En algunos casos, incluso favorece la posibilidad de utilizar la instalación en días frescos o durante la noche.

Ahorrar energía con manta térmica

Una de las ventajas más evidentes de una lona térmica es el ahorro de energía, puesto que sustituye o complementa la acción de los sistemas de calefacción de las piscinas (bombas de calor, intercambiadores, calentadores eléctricos…), por lo que el usuario puede utilizar dichos equipos con menos frecuencia o a una potencia inferior. Así pues, el uso de un cobertor de verano es la forma de calentar el agua de la piscina más sostenible para el medio ambiente y, además, el medio más económico.

Contacta con nosotros